En vez de querer ser esto o aquello, conviértete en ungigante silencioso e inamovible. Así es la montaña. No pierdas el tiempo tratando de impresionar a la gente. Si te conviertes en la clase de hombre a quien la gente puede respetar, te respe-tarán sin que hagas nada.
El Maestro zen Hui-Hai ha dicho que, “Busca y lo perderás; no busques y lo obtendrás de inmediato. Detente, y eso está aquí. Corre, y eso no está en ninguna parte”.
¡Ay de aquel que solamente vive despierto!
Y que lanza sobre las cosas UNA sola mirada
Porque al llegar a la luz o a la sombra no sabrá nada
Ni para que ha vivido ni porque ha muerto
Mirad las flores, mirad las mariposas
Y ateos o creyentes ¡MIRAD la luz del día!
Pues sí Dios no existiera ¿Quien haría estas cosas?
Pero sí Dios existe ¿Para qué las haría?
Zhang Zhuang…cinco movimientos, una conciencia.
El bambu vacío por el cual pasa el infinito en olas de energía, en las extremidades se genera el Qi.
El palacio del tallo de Jade se impregna totalmente de Yin.
Los puños adquieren la dureza de hierro pero con la suavidad del Tao, en un flujo constante.
Los pies se han enraizado.
Como un árbol, contemplo el infinito
Zhang Zhuang…cinco movimientos, una conciencia.
El bambu vacío por el cual pasa el infinito en olas de energía, en las extremidades se genera el Qi.
El palacio del tallo de Jade se impregna totalmente de Yin.
Los puños adquieren la dureza de hierro pero con la suavidad del Tao, en un flujo constante.
Los pies se han enraizado.
Como un árbol, contemplo el infinito
Hablemos uno a otro tus hermosas palabras, ¡Oh Gran Espíritu! Digamos por qué estoy triste, seamos amigos. ¿Dónde he de buscar tus flores, tu canto y tu palabra?
El espíritu dijo así:
“¿acaso tú eres tu propio amigo o acaso vives por ti mismo?”
¿Yo? Yo vine a vivir en la Tierra
¿acaso no he de ser feliz? ¿Acaso no he de conocer la alegría? Yo vine a vivir en la Tierra.
Que tu corazón se ponga contento, que tu corazón se tranquilice, que tu corazón se aplaque.
Se tú, Dios en mí, moldéame porque yo vine a vivir en la Tierra
Soy la tierra fértil, esa tierra fértil que eres tú. Cultívate y transformaré tu voluntad en fruto… pero cuidado: abandónate, y te abandonaré. Soy generoso, pero exigente: un desierto no florece con tan sólo desearlo.
¡Oh siervo!, ¿por dónde andas en busca de mi?
Mira que yo estoy a tu lado.
Yo no estoy ni en el templo ni en la mezquita; no estoy ni en la Cava ni en la Kailash 1.
Ni estoy en los ritos y ceremonias, ni en el Yoga, ni en la renunciación.
Si eres un verdadero buscador, al fin me encontrarás en el momento del tiempo.
Kabir
Muere a cada instante de modo que puedas renacer a cada instante
Muere a cada instante al pasado, despréndete de todo el polvo que hayas acumulado y vuelve a ser fresco. Pero esto ha de hacerse continuamente, porque al momento siguiente, de nuevo, el polvo se ha acumulado.
Nunca te sientas tan perfecto que bajes la guardia o aligeres la vigilancia. Quierete bien pero no te prostituyas a ti mismo.
“Si quieres despertar a toda la humanidad, entonces primero debes depertar la totalidad de tu propio ser. Si deseas eliminar el sufrimiento en el mundo, entonces acepta todo lo que es oscuro y negativo en tí mismo. Porque en verdad, el regalo más grande que tienes para compartir, es el de tu propia auto-transformación.”
-Lao Tse
EL CAPI 